Tuesday, December 1, 2020

Los isleños: apuntes mínimos.

Tomado de Grandes Nostalgias.

Los hijos del Isleño Gabriel y de Eufemia fueron cinco. Miguel, Pedrón, Manuel, Gabriel jr y José. Cuando mis padres se mudaron para la Casa del Cocal en 1956 ya Eufemia había muerto y por tanto no la conocí. Eufemia "donó" su apellido Ramos y por algún motivo que desconozco a todos los isleños se les decía "los Ramos". Mi papá nunca fue Rafael González Ferrer. Siempre sería "Rafael Ramos". Si acaso, como excepción, uno "de los Ferrer de Yaguajay". Manuel vivía en el lado sur de la casa paterna, estaba casado con una mujer de Los Cieguitos, Mayajigua - Emilia Ruiz - y tenían un hijo llamado Manolito. José (Pepe) tenía su casa en el faldeo de La Loma, al fondo suroeste de  la finca paterna, lindando con la finca de Los Gocéndez, su mujer se llamaba Caridad Navarro, de Plateros y tenían dos hijos: Ignacio y Guillermo (Los Cagatrillos). Gabriel (Belillo) tenía su casa en el fondo suroriental de la finca paterna, lindando con la finca de Justino Martínez, estaba casado con Bille Navarro (hermana de Caridad) y tenía seis hijos: Felicia (Fela), Luisa (Liche), Frank, Julio (Ratón Comehilo), Pedro y Félix (Pitín). Pedrón estaba soltero y vivía con Miguel y su padre en la casa paterna. Miguel (Lagata) estaba casado con María Lara, de Plateros, y tenía cinco hijos: Miguel Angel (Tite), Clemente, Leonardo, Maurilio (Cometierra) y Aleida. Pitín y Guillermo eran de mi edad. Guillermo era un poco mayor y Pitín un mes menor. Miguel estaba al frente de la finca pero aunque todos tenían un "pedacito de tierra" apenas la cultivaban porque no era necesario antes de 1959. Técnicamente La Loma que estaba al fondo de la finca de Gabriel no tenía dueño - el latifundista de turno no la ocupaba - y Belillo la había ido incorporando poco a poco a su Patrimonio. Todos los hijos trabajaban en la finca en asuntos relacionados con la caña de azúcar y completaban el año laboral en Yaguey Abajo y en Jagueyal en el mismo rubro dentro de las grandes fincas de los latifundistas de la zona. Pepe y Belillo tenían ínfulas de negociantes y les encantaba el trapicheo. En ese sentido eran muy parecidos a mi tío paterno Cisco. De modo que si podían buscarse unos kilos en algún negocio obviaban el trabajo en el campo y se iban al pueblo. Los cinco hermanos eran analfabetos potenciales mas allá de que eran dueños de cierta picardía natural que los hacía parecer personas instruídas. Lo que no siempre resultaba. Les costó muchísimo tiempo aprender a recorrer Yaguajay y Caibarién. Antes de la inauguración de la Carretera, como todos, viajaban "al pueblo" en el Gascar o en algunos de los fotingos que se atrevían a recorrer el tramo de terraplén de treinta y dos kilómetros Caibarién/Yaguajay. Para ello tenían que ir hasta Dolores o hasta Yaguey Abajo a caballo. A veces se arriesgaban y llegaban hasta Caibarién en las propias bestias. Caibarién era el pueblo en donde se hacían los "negocios". Era el mas grande en muchos kilómetros a la redonda, en verdad bastante rico y todo el mundo dependía de sus grandes almacenes y de su puerto que, aunque había perdido cierta importancia después de la aparición de la Carretera Central en la decada del Treinta, todavía recibía mercantes en la rada de Cayo Francés. Durante los primeros viajes al pueblo los hermanos apenas podían salir de las cuadras que marcaban la entrada y por eso se les hacía muy difícil encontrar tiendas o almacenes que recibieran y compraran sus productos. Su asoramiento y despiste permanentes siempre los delataba como "guajiros ñongos". Después llegarían al centro del pueblo y se toparían con los establecimientos de la gente "que compraba". Allí estaban los japoneses y los chinos. Los japoneses eran mas bien vendedores industriales. Los chinos eran compradores compulsivos porque vendían de todo, a precios muy módicos. Pepe y Belillo eran comerciantes, sobre todo, de carbón vegetal, de animales de corral, de granos y de frutas. Para entonces ya Belillo era un carbonero de marca mayor. Haber llegado al centro del pueblo no quería decir que dominaran toda su geografía y por eso continuaban pasando mucho trabajo con las direcciones. Les daba pena preguntar tanto porque eran dos hombres "hechos y derechos" y no les gustaba que los "poblanos" los consideraran un "par de comemierdas". Por ese motivo no les quedaba mas alternativas que preguntar varias veces en el mismo Establecimiento Comercial, algo que en ocasiones, sacaba de quisio a los cangrejeros con negocios. Parecían dos autómatas dándole vueltas a la cuadra por el temor de salir del cuadrante y luego no saber como regresar. Uno de sus clientes era un chino que casi siempre se quedaba con cualquier cosa que le llevaran. El chino era un gran fabricante de dulce de coco y por ello le encantaban los cocos criollos del Cocal de los Ramos que le llevaban los guajiros de Plateros. Incluso los pagaba bien. Hasta que un día se sintió saturado porque también tenía otros proveedores sin contrato de compra. Cuando los pichones de isleño llegaron a su Establecimiento los saludó amablemente y les dijo que "hoy no quelía coco polque ya tenía demasialo". Pepe y Belillo se marcharon pero como no se atrevían a salir de la cuadra comenzaron a tratar de vender sus cocos a los otros comerciantes del entorno. Ese día nadie quería cocos por muy del Cocal de Plateros que fueran. Con la vaga esperanza de que el chino se cansara de ellos y les comprara sus cocos pasaban constantemente por su negocio  y antes de seguir se paraban en la puerta y preguntaban "chino, quiere coco". El chino, decentemente, siempre respondía que "glacia muchacho, ya le dije que hoy no quielo coco". Llegó un instante en que el chino explotó, salió desde detrás del mostrador y encarándolos con cara de pocos amigos les espetó "ya le he licho mil vece que no quielo coco, que calajo le pasa a ustede guajilo de mielda, se etán bullando de mí o que coño". Pepe y Belillo no regresaron mas por la tienda del chino y lograron llegar hasta la Estación del Gascar con la ayuda de algunos viandantes. Dejaron los cocos en el andén de la Estación. Contaron la anécdota a la familia y amigos sin ningún pudor y para toda la familia solo significó un pase imparable de risa y la historia llegaría a convertirse en un clásico de las historias de guajiros en el pueblo. Todavía hoy a veces la recordamos en las tertulias miamitas y tratamos de imaginarnos, otra vez, a aquel par de guajiros analfabetos, asombrados, tratando de vender cocos a un chino qe les había repetido hasta el cansancio que no quería cocos solo porque no se atrevían a salir del espacio que dominaban.
Pepe - siempre se le dijo Peperramos - tenía un problema de dicción. No podía pronunciar la erre y por tanto la arrastraba en favor de la de. Le familia lo fastidiaba pero nunca se ponía bravo. Incluso repetía los famosos "versos del tren" sin ningún complejo cuando alguien se los pedía. "Edde con edde cigaddo, edde con edde baddil ddapiddo codden los caddos por la linea del feddocaddil". Un día Gabriel lo envió junto con Belillo a que fueran a la Ferretería de Caibarién por un encargo. Llegados al pueblo no sabían como llegar a la ferretería y de nuevo la pena no les permitía preguntar. Esta vez no solo les estaba ocurriendo lo de siempre sino que habían olvidado el nombre del lugar al que debían ir. Durante mas de una hora trataron de recordarlo. Pero ni atrás ni alante. Para ellos "ferretería" era una palabra complicada. Hasta que a Pepe se le abrieron las entendederas y dijo "Belillo, es una cosa así como fedde fedde fedde algo como....feddefuddia, eso, feddefuddia". Cuando se llenaron de valor y preguntaron nadie en el pueblo sabía lo que era una "feddefuddia". Solo cuando dijeron lo que tenían que comprar fue que alguien les indicó el camino. La gran anécdota de la "fedde" superaría, por mucho, a la de "chino, quiere coco".
Caridad Navarro le fue infiel a Peperramos con un solterón del Vivero llamado Erasmo. Se decía que los miembros de tal familia tenían la costumbre de "mudarse" para la casa de las mujeres casadas y tratar de seducirlas. Para entonces ya vivían en el alero de la carretera, al lado del Río. La infedelidad fue notoriamente pública. Mi papá le puso "Gollito" al pegador de tarros. Desde entonces el calvario de la Familia Ramos/Navarro fue prácticamente innombrable. Excepto Guillermo e Ignacio las niñas fueron "adoptadas" por los vecinos. Adolfina  la de Pablo fue la gran receptora. Raquelita vivió un tiempo en mi casa y otro en la casa de Tíaestela. Generalmente se trasladaban a las "casas de acogida" por las noches. Caridad se llevó con ella para Caibarién a Mirita, la mas pequeña y eso la convirtió en la única "no guajira" de la familia. Se comentaba que "ahora Caridad vivía en un minirrancho detrás del antiguo aeropuerto". Los apelativos para con la madre alcanzaron las cotas mas grandes del desprecio. Hasta que un día las aguas cogieron su nivel y los hijos volvieron a contactarla. Tuvo un hijo con Gollito que nació con una especie de lunar/quemadura en la cara. Se relacionaba bastante con sus hermanos. Debo decir que un hermano del "seductor" - una gran persona llamada Gonzalo "el ahoracado" (que terminaría suicidándose porque - segun algunas fuentes - estaba impotente) consiguió que mi mamá le lavara su ropa y que también intentó "mudarse" para mi casa. No podría precisarlo pero me parece que mi mamá tuvo que pararlo cuando trataba de llevar las conversaciones a otros niveles. Posiblemente mi papá le pidiera que lo alejara de la casa cuando ella se lo contó. Maricel logró vencer un curso intensivo que la graduó de Maestra Primaria. Recuerdo que lo hizo junto a su prima Terresa la de Belillo en Remedios en los tiempos en que yo estudiaba allí la enseñanza preuniversitaria y que nos veíamos todos los días. Maricel trabajó muy poco en Educación, creo recordar. Conoció a un alfarero de La Habana llamado Faustino (tenía una hija) y se fue a vivir con él. Teresa le siguió en la ronda de los "amigos del marido de Mary" y también consiguió una pareja: Felito. Una visita de Linita a la casa de su hermana Maricel le permitió conocer a otro habanero y por eso se quedó en el suburbio capitalino de Calabazar. Gricelda se enamoró de un hombre de Agabama, Las Villas, y se casó con él y abandonó el barrio. Raquel estudió una carrera técnica - no puedo precisar - y logró graduarse. Se casó con un tipo "comunista" de Cambao llamado Alvarito Tuero y desde entonces tuvo varios trabajos administrativos. Mirita "la poblana" - un dechado de belleza auténtica - se fue para La Habana con sus hermanas mayores y allí realizó su vida. Hasta que un ciclón apocalíptico desbarató el bohío de Peperramos el padre y el hijo (Ignacio) vivieron en él. El Gobierno dio materiales de construcción a los afectados y entonces Pepe decidió hacer una casa en Yaguajay en donde también le garantizaron un terreno al norte centro el pueblo. Una buena casa prefabricada que yo ayudaría a levantar. Desde 1980 Guillermo vivía en los Estados Unidos. Guillermo fue de los "enviados a la fuerza" a Miami, acusado falsamente por las Autoridades de "peligrosidad" en los tiempos nefastos del Exodo el Mariel. En el bohío de la orilla del Río Ignacio vivió con dos mujeres. Yamilé, de Agabama (tuvo un hijo con ella) y Milagros "Bola e Plomo", de Dolores. Milagros lo traicionó con su primo hermano Pedrito el de Belillo cuando él trabajaba en la Construcción en Sancti Spíritus. Mury Cometierra los sorprendió "jugando sobre un taburete" en el bohío y se lo contó a Ignacio. Cobrar la traición para Ignacio consistió en convocar al hermano de Bola e Plomo y darle una soberana paliza al primo hermano en una noche de Carnaval en Caibarién. Acto, que al igual que la traición de Caridad, también llegaría a olvidarse con el paso del tiempo. Milagros vivió unas semanas con Pedrito en su casa pero lo abandonó muy pronto porque aquello "había sido una locura". Todos los días padre e hijo venían a Plateros a trabajar. En bicicleta o en la guagua local. Pepe en su pedacito de tierra e Ignacio en los potreros de La Loma, con la Empresa Pecuaria. Pepe jamás volvió a juntarse con ninguna mujer. Ignacio las tuvo "a jases". Se arrimaba con cualquiera. Decía que "no podía estar solo". La que mas le duró fue una chica de Caibarién llamada Martha. Con ella tuvo tuvo otro hijo. Cagatrillo tenía fama de golpear a las mujeres y de ser "un gran padre". Yo lo jodía y le decía "jamás te has empatado con una mujer de verdad, por eso eres así". Hay que sonarlas a veces, me respondía, sonriendo. Un día se le ocurrio pedirme que lo incluyera "en el Bombo". Si me lo saco me voy de Cuba, me aseguró. Le dije que él era comunista y le recordé cómo se burlaba de mí cuando "yo quería tumbar a Fidel Castro". Se echó a reír y entonces le llené los datos y envió la planilla  del Sorteo de Visas para Cuba a la Sina Norteamericana en La Habana. Luego me diría en Usa que otro amigo le completó una segunda planilla. El caso es que le llegó el Bombo y las madres de sus hijos le permitieron llevárselos para los Estados Unidos. Yo me enteré en Santiago de Chile. Apenas podía creerlo. Pero me alegraba. Llevarse a sus hijos fue, tal vez, la mejor acción que jamas hizo por ellos. Joelito, el menor,  vivió unos años con su tío materno Javier en Nueva York y Johanlandry se quedó en Naples con su papá. Cuando España lanzó para Cuba la Ley de la Memoria Histórica mis primas segundas aplicaron para Ella. Su abuelo fue localizado muy pronto en Islas Canarias y el papeleo navegó con mucha fluidez. Como hijas de alguien de Primera Generación en Cuba enseguida tuvieron su Pasaporte y la grata noticia de que podían salir de Cuba para donde les diera la gana. Raquel fue quien hizo uso de tal prerrogativa. Porque ya Maricel y sus hijos habían llegado legalmente a Usa, gracias a una reclamación de la hija norteamericana de Faustino. Algo que también había hecho Mirita, cortesía del padre americano de su hija. Gricelda no tenía interés en viajar y Linita solo deseaba hacerlo de visita. Raquel terminaría por establecerse en Islas Canarias, a donde logró llevarse a su marido "excomunista". Guillermo murió en el año 2016 a raíz de un infarto cerebral en Miami. Estaba casado con la ecuatoriana de toda la vida, con la que había tenido un hijo. Peperramos estuvo en Estados Unidos invitado por Ignacio en el año 2011. Estaba muy bien y muy feliz a pesar de los muchos años que le habían caído encima. Recuerdo que ya yo vivía en la casa de mi primo Carlito González Rodríguez, muy cerca del trayler de Guillermo y que en las noches, en el patio, recordábamaos los tiempos del Plateros Histórico y que yo le pedía que nos hiciera el cuento del "chino quiere coco" y el de "la fedde". Pepe los repetía hasta el cansancio, encantado. Aquel chino quería matarnos - se reía  a mandíbula suelta. Pepe murió con achaques de viejo en su casa de Yaguajay. Tenía mas de noventa años. Se que Gri (Gricelda) tiene hijos pero desconozco cuántos. Tampoco sé si continúa con el mismo marido. Me parece que la última vez que la ví había venido con él a Plateros. Y de ello puede haber mas de treinta y cinco años. Creo que Linita tiene dos hijos. Por lo menos pienso que eran dos los que ví de niños cuando visitaba a La Habana. La última vez que me la encontré fue cuando vino para el velorio de Guillermo. Llegó en el último instante y estaba perfectamente bien. Maricel tiene tres hijos y está separada de Faustino y sigue sola. Raquelita tiene dos, que están en Cuba. Acerca de nietos solo sé que Raquel e Ignacio sí los tienen. Raquel, tres e Ignacio, dos. Pero es posible que todos los hermanos sean abuelos excepto Guillermo. Se nos ha pasado esa conversación. De los hijos de Belillo agraciados con la Ley Española de la Memoria Histórica han estado, trabajando en los Nerserys de Homestead, Florida, Frank, Luisito, Pedrito y Pitín. Teresa vive en Estados Unidos pero llegó Via Reclamación de su ex. Tiene un hijo y dos nietos. Su ex falleció el año pasado. Caridad es viuda del "seductor del Vivero". No se volvió a casar. Todos sus hijos se ocupan de ella y del medio hermano. Me han enseñado sus fotos. En verdad no se ve como una mujer anciana todavía. Tiene algún problema coronario pero lo va superando. Hace mas de veinticinco años que no la veo y creo recordar que la última vez que la ví en Cuba, allá por los noventa, no me recordaba y tuve que identificarme. Belillo vivía con su hija Helena en el año 2012 cuando regresé a Cuba por primera vez. Tenían una casa en el lado occidental de la Tienda. Estaba completamente ciego y tenía casi cien años. Pero lo ví muy bien. Me recordó enseguida y me dijo, como tantas veces en el pasado, "rafaelillo, carajo". Recordé el cuento del chino y de la fedde pero no traté de que lo que lo repitiera. No deseaba que tuviera que "ver" hacia dentro. Poco después fallecería. Su esposa Bille había muerto hacía varios años debido a complicaciones hepáticas cuando yo estaba en Cuba. Fela se casó con Jesús López, un "pariente" de Yaguey, hijo de Olegario López, cuya mujer era famila de los isleños. Toda su vida ha vivido en Yaguey, aunque tal vez hoy lo haga en Dolores en un barrio de expansión social. Tuvieron tres hijos. Dos hijas ( conocí a una nieta que está en los Estados Unidos ) y un hijo que tuvo un accidente trabajando con madera y  que quedó paralítico de la cintura hacia abajo. Jesús falleció hace poco. Julio pasó gran parte de su vida trabajando en la Empresa Pecuaria de Yaguajay y finalmente trabajando en tierras que le ha prestado el Gobierno. Se casó un par de veces con mujeres de Caibarién - en donde terminó viviendo - pero le fue mal en sus matrimonios. Hoy mismo vive en casa de su tía Nena, mi tía política ex esosa de Cisco, en Caibarién, según me contó Margarita, la ex exposa de mi amigo Tico. Frank se casó con Susana Tuero, la hija de Chicho el de Cambao. Poco interesado en trabajos agrícolas siempre se las arregló para hacer otras labores. Antes de jubilarse fue chofer de tractor para una Cooperativa. Construyó una casa en Caibarién. Tiene dos hijos. Una hija que vive en Caibarién y un hijo que vive en Colombia. La hija le ha dado tres nietos. Pedrito demoró mucho en casarse. Pero cuando le cogió el gusto al matrimonio lo ha hecho varias veces. Poco selectivo con las mujeres se separa constantemente. Aunque ha trabajado en Pecuaria y en otros trabajos con el Estado lo de él es la cría de ganado en donde siempre le ha ido muy bien. Sigue viviendo en Plateros, en la antigua escuela Félix Varela, convertida en hogar. Luisa se encontró con un chico que fabricaba pozos artesianos cuando trabajó con su prima Aleida en la Conejera de Dolores. Terminaría por casarse con él. Un gran tipo, Zeneido, del Guajén, en Vueltas. Comenzarían viviendo en el campo hasta que construyeron una casa en Caibarién. Un accidente en un pozo casi mata a Zeneido y nunca se recuperó de las secuelas. Después de su jubilación se dedicó a "anotar" números de Bolita (prohibido) para los jugadores compulsivos y le fue de maravillas. Tuvieron una hija que le dio dos nietos. Falleció el año pasado. Pitín siempre ha padecido de ciertos trastornos neurológicos que no le han impedido trabajar en la finca, haciendo carbón y criando animales. Ello lo salvó del Servicio Militar. Un día se enamoró y se casó con una mujer de Dolores. Tuvo una hija que, según la gente que la conoce, "es una muñeca". Creo que vive en Dolores. A Luisito tampoco le interesó el trabajo asalariado. Aunque lo ha ejercido su interés está en los negocios y en los apuntes de números de la Bolita. Se casó con la hermana de la mujer de Nené y se divorció después de haber tenido dos hijos. Creo que tiene nietos. Actualmente está unido a una mujer de Yaguey que fue la esposa de Onel Vega (actual esposo de mi prima Mirelia Fumero) y me parece que viven en ese barrio. Gabriel (Nené) es el segundo "estudiante" de la familia. Estudió una carrera técnica - olvido la Rama - pero apenas la ejerció. Tampoco le interesa la agricultura ni el trabajo asalariado. Se casó con una chica del Vivero, la hija de Roberto el Gago. Fue Director de la Tienda de Plateros (su casa estaba en la trastienda) y cuando terminó de levantar la definitiva en Caibarién (altos  de la de su hermana Luisa) se mudó para la ciudad. Hoy día es un albañil de renombre (un hombre orquesta en asuntos de construcción fina) y vive de eso. Incluso es el único hermano que ha podido trabajar en su especialidad en los Estados Unidos. Su condición de ciudadano español le permitió a su hija y a su marido viajar a Islas Canarias, en donde viven y trabajan. También tiene otro hijo que está intentando viajar a España. Gran parte de mi casa y de mi Studio en Caibarién los ha construído Nené y sus ayudantes. Helena estudió Licenciatura en Inglés en la Universidad Central. Actualmente es Profesora - creo - del Preuniversitario local. Se casó con un colega de Mabuya, Ciego de Avila, que finalmente dejó Educación para dedicarse al Turismo de Traducción/Guía en Los Cayos. Le va muy bien. Tanto que le dieron una casa en los anexos del Reparto Van Troi, Caibarién. Tienen dos hijos. Manuel se mudó para Los Cieguitos porque su esposa Emilia así lo quería. Manuel trabajó en la finca del suegro, Valerio, y en trabajos ocasionales en el campo. Allá nació Eddy y el tercer hijo, El Niño. La familia González/Ruíz siempre regresó a Plateros y lo harían hasta que la edad y las enfermedades se lo impidieron a los padres. Manolito - unos meses mayor que yo - estudió una carrera técnica (tal vez maestro primario) pero trabajó en cargos administrativos en Yaguajay. En donde se casó y sé que por lo menos tuvo una hija considerada una auténtica belleza. Dejé de verlo antes que a Eddy y por supuesto no conozco a su familia. Según mi primo Pico Leyva la mujer de Manolito era una belleza, "demasiado para él". Terminarían divorciándose. Eddy es un "isleño" nato. Trabajó durante mucho tiempo en Maquinaria Agrícola en Mayajigua. Hace poco nos encontramos en Facebook y me dijo que vivía en Sancti Spíritus y que Emilia estaba todo "jodía" pero "viva todavía", guapeando y que me recordaba perfectamente. Vive con El Niño en Mayajigua. Dejé de ver al Niño cuando todavía era un jovencito y creo que estudiaba en el Pre de Centeno. Era pitcher zurdo y oí decir que tenía muy buena velocidad y mucho talento. Creo que no pasó nada con su pasión por el beisbol. Manuel murió muy viejo y enfermo y parece que sufrió mucho. Tite el de Miguel se casó muy joven con Lidia la de Catalina, la mujer de Ramón Navarro. Poco aficionado a los trabajos agrícolas sacó la cartera de chofer y pasó el resto de su vida tirando caña para el Central Marcelo Salado, antiguo Reforma. Cuando se retiró se dedicó a chapear en las carreeteras y a sembrar en tierras prestadas para "paliar la situación". También trabajó un tiempo en la finca familiar. En su camio soviético V-8 - su gran amor - recorrimos gran parte de la antigua provincia de Las Villas para jugar pelota los domingos. Tuvo tres hijas. Flora Ondina, nacida debajo del apocalipsis de Octubre del Ciclón Flora en Yaguajay en el año 1963, pocos meses después de mi hermana Tery. Tiene tres hijos. Un hijo con Quitín, un amigo nacido en Jagueyal - Yandier - (es abuela). Una hija con un hombre de Yaguajay (es abuela) y otra con Casildito, el hijo de Casildo, un hombre de Santa Rosa. Florita vive en la antigua escuela bonita de Santa Cruz y hoy mismo trabaja en Caibarién, creo que como aseadora con el Gobierno. Marlenys estudió en la Escuela Formadora de Maestros Primarios de Santa Clara y se graduó. Siempre ha trabajado como tal. Se casó con un muchacho de Dolores - Abel - (hijo de una heroína local de La Revolución) y tiene dos hijos. Uno de ellos salió enfermiso y la lucha para mantenerlo a flote ha sido proverbial. Viven en  La Playa, Caibarién. Merlín es la bella de la familia. Amante de la vida libre tiene un historial de novela. No terminó estudios y en el presente tiene un negocito de belleza en donde la pintura de uñas es su fuerte y le va bien. Su primer matrimonio con un "cochero de pasaje" de Dolores terminó mal. Hoy está casada con un tipo "feo" pero "magnífico marido" y tienen un hijo que da la impresión de ser un yutuber de las Redes. Vive en el Crucero, Caibarién. Tite y Lydia - y algún nieto ocasional - viven en Reforma, en la misma casa que le dio el Gobieno a Tite por ser "trabajador ejemplar". Clemente nunca tuvo inclinaciones agrícolas. Como Tite evadió el Servicio Militar por ser "hijos mayores" y comenzó trabajando en la Reparación de Líneas de Ferrocarril en Dolores al mando de un hombre de apellido Palacios. De Cocinero. Allí se enamoró de la hija de un señor al que le decían Quinto - Elisabet "Mondongo" - y se casó con ella. Cuando mi Tía Celia y su familia se mudaron para La Habana Clemente le compró la casa bonita y vinieron para Plateros. Clemente comenzó a trabajar la tierra porque la "situación" del país se complicó. Sin abandonar su trabajo de Cocinero. Finalmente se mudaron para Caibarién y terminaron viviendo en una casa de edificio permutada en el Reparto Van Troi. Clemente se retiró, continuó trabajando en la finca un tiempo hasta que colgó los guantes. Tienen dos hijas - Diana e Ismaray - y dos nietas. Las "ayudas" de unos parientes "franceses" de Ely le han ayudado a sobrevivir. La última vez que estuve en Cuba Diana y el marido - un negociante de muebles -  estaban construyendo un Resort de lujo detrás de su residencia en el centro del pueblo. Con la ayuda francesa. Diana llegó a ser una Enfermera muy bien ranqueada, profesión que dejó cuando ser profesional equivalía a un insulto en Cuba. No tengo información técnica de Ismaray. Una noticia obtenida aquí en Miami me aclaró que Diana y el marido estaban "viajando al exterior en busca de cosas que vender" porque el grifo francés se había agotado. Leonardo sí tuvo inclinaciones agrícolas. Generalmente trabajó en la finca hasta que, motivado por su hermano Tite, sacó la Cartera de Chofer y comenzó a trabajar durante las zafras azucareras. Jamás abandonó el campo. Una Dependienta de Tienda de Yaguajay llamada Isabel se enamoró de él y tuvieron un hijo sin llegar a casarse. Cuando fui Profesor en la Secundaria de Yaguajay Leonardito estaba en Séptimo Grado, era muy inteligente y muy parecido al padre. Leonardo terminó casándose con Gloria Prida, de Cambao, y se fue a vivir con ella para la casa de sus padres. A vivir solo "por la noche". Porque todo el día lo pasaba en Plateros. Tuvieron un hijo que sería mi alumno en la Secundaria citada. Prida era un estudiante discreto. No tengo información sobre Leonardito aunque es posible que esté en los Estados Unidos. Prida está al frente de la finca de su abuelo. No he podido ver a Leonardo en mis cuatro viajes a Cuba. Sé que está enfermo del corazón. Y parece que seriamente enfermo. Leonardo sí pasó el Servicio Militar. Al igual que Frank el de Belillo e Ignacio el de Pepe Maurilio venció el Curso de Construcción Industrial en Caibarién en 1976. Creo que los tres se graduaron de Carpinteros de Encofrado. Yo fui profesor en esa Escuela, de una "Asignatura Mixta". Ellos me pusieron la piedra para que pudiera ser presentado a los Jefes y poder trabajar. Fue mi primer trabajo oficial y fue también la primera vez que me expulsaron de un lugar debido a "problemas ideológicos". Pero ninguno de los tres ejercieron la profesión excepto, algún tiempo, Ignacio. Maurilio es un hombre típicamente campesino, casero e introvertido. Cuando fue citado para cumplir con el Servicio Militar casi se vuelve loco ante la certeza de abandonar la casa. No obstente lo pasó. Eso y un accidente de tránsito en donde casi pierde la vida en la carretera Yaguajay/Caibarién le dejaron ciertas secuelas neurológicas de las que nunca se recuperó. Terminó casándose con Deysy Navarro, la hija de Roberto. Tuvieron dos hijos: Yuniel y un segundo cuyo nombre se me pasa. Yuniel  es un campesino nato. Se recuperó de un cáncer de piel invasivo y se ha casado dos veces: con la primera mujer tuvo un hijo. El otro no tiene interés en el campo y es chofer de un Dirigente de Cayo Santa María. Está casado con una  chica de Dolores y no tiene hijos. Aleida se enamoró del amigo pocero de Zeneido el de Liche - el Gago de Mayajigua - y se casó con él. El Gago era mejor pocero que Zeneido y toda su vida se ha dedicado a ello. Comenzaron viviendo en una casa atípica campesina - portal y habitación trasera dividida de una agua - al lado de la nueva casa familiar a la orilla de la Carretera. Cuando Aleida se mudó para Mayajigua Maurilio se quedó con la casa raíz de su matrimonio.  Aleida tuvo dos hijos. Idel jr, el mayor - nació en Plateros -: dejé de verlo antes de que comenzara la Secundaria. Sé que era inteligente y que al menos terminó el Pre. E incluso que se graduó de alguna carrera técnica, cuya Rama no preciso. Hace poco me contactó por FB. Vive en Caibarién y creo que es chofer de guagua. Al segundo lo ví solo una vez cuando era un niño. Recuerdo que era rubio, igualito a su padre. Cuando Aleida se llevó a María para Mayajigua después de la muerte de Miguel Maurilio y su familia pasaron a vivir en la casa familiar. En donde todavía viven. Pedrón nunca se casó. Siempre vivió en la casa familiar. Era una excelente persona. Familiar como mi padre, siempre visitaba a toda la familia. Trabajó demasiado en la finca que comandaba su hermano Miguel Lagata hasta su muerte. Vivía de su retiro y de algún jornal ocasional. Era mi pariente/amigo. Lo cuidé cundo cayó enfermo terminal en el Hospital. Tanto como el resto de su familia mas cercana. Aunque al principio me negué - no era mi fuerte - terminé por despedir su duelo en el Cementerio de Caibarién. Mi única experiencia.

Noviembre 28  del 2020.
Miami.
Usa.

















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